Propiedades e indicaciones:
El componente principal de la Lavanda es el aceite esencial, que
contiene alcoholes terpénicos (linalol, geraniol y borneol) y sus
esteres, entre otras muchas sustancias, responsables de sus propiedades
sedantes del sistema nervioso central, hipotensoras, anti-infecciosas y
bactericidas.
La Lavanda es
un remedio eficaz para calmar los nervios y en caso de ansiedad,
irritabilidad, insomnio, taquicardia y migrañas. Es también excelente
como tónico digestivo ya que ayuda a expulsar los gases.
Por su
acción calmante, antiséptica y cicatrizante, en uso tópico se aplica en
baños y compresas para tratar dolores reumáticos, infecciones cutáneas,
heridas, picaduras de insectos, etc.
INDICACIONES TERAPEÚTICAS
Estómago (estimulante).
Estrés e insomnio (baño con decocción
de flores).
Migrañas y Cefaleas (flores en infusión).
Palpitaciones de origen nervioso del corazón.
Estados de neurastenia.
Hipertensión (en infusión con muérdago
y hojas de olivo tiernas).
Llagas (cicatrización).
Afecciones reumáticas.
Contusiones.
Esguinces.
Droga: Sumida florida.
Propiedades terapéuticas/farmacológicas
Cosmética, perfumería, antiséptico, cicatrizante,
colerético, antiespasmódico, diurético, carminativo,
sedante.
INDICACIONES
Uso interno: Ansiedad, insomnio, meteorismo, espasmos digestivos,.
Uso Externo: Faringitis, otitis, heridas.
Contraindicaciones/precauciones: Embarazo, lactancia, niños, gastritis,
ulcus, colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn, síndrome
del intestino irritable, epilepsia, Parkinson.
Efectos secundarios: Dermatitis de contacto; neurotóxico a
dosis muy altas (el aceite esencial).
USOS Y PROPIEDADES DE LA LAVANDA
Algunos de los principales usos y propiedades
de la lavanda, son los siguientes: Propiedades antiespasmódicas, antisépticas,
diuréticas, cicatrizantes y analgésicas. Utilizada en forma de infusión, decocción,
tintura, pomada y loción.
Para obtener el aceite esencial, de amplio uso
en perfumería fina y cosmética. Empleada al interior en afecciones de las vías
respiratorias, vértigos, diarreas, digestiones lentas,
etc.
Al exterior, en casos de llagas, eczemas, picaduras
de insectos, quemaduras y en baños sedativos.
Las flores desecadas y en pequeñas
bolsitas se acostumbra colocarlas en el interior de los muebles
para perfumar la ropa y preservarlas de las polillas, también
dentro de almohadas.
Precauciones:
Se aconseja no aplicar aceites esenciales de Lavanda por vía interna
durante el embarazo, la lactancia, a niños menores de seis años ni a
quienes sufren trastornos gastrointestinales de diversa índole
(gastritis, úlceras, colon irritable, colitis, etc.) o padecen
epilepsia, Parkinson u otras enfermedades neurológicas.
El aceite
esencial puede provocar dermatitis de contacto a personas sensibles y en
dosis elevadas es neurotóxico.